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Ilusión de Ebbinghaus |
Iniciado ya el nuevo curso escolar renovamos nuestras fuerzas e ilusión para continuar avanzando en nuestro Proyecto Intercentros: convertirlo en algo propio de todos y todas los y las profesionales que trabajamos en cada uno de los centros que lo integramos, es uno de nuestros objetivos fundamentales.
Pertencer a este Proyecto empieza ya a cobrar cierto nivel de sello de calidad en convivencia positiva en todas y cada una de las actuaciones que se programan a lo largo de cada curso escolar. Y, por supuesto, no lo decimos por la repercusión mediática y/o la que para la administración pueda tener el hecho de aglutinar a 13 centros escolares, con sus respectivas comunidades educativas "unidas" en torno a propuestas que optimizan la organización y funcionamiento, que nos enredan y comprometen con el desarrollo de valores y la dinamización de la participación de todos y todas mucho más allá de los muros que parecen separar o distanciar lo educativo de lo cercano, de la calle, de la gente y agentes de a pie que también quieren poner su granito de arena en este, ... siempre apasionante Proyeto Intercentros "Unidos por la Paz".
Este nuevo curso nos lo planteamos como una nueva y emocionante ocasión para continuar empeñados en cambiar todo lo que no nos gusta: la injusticia social, la insolidaridad, la marginación y el maltrato en todas y cada una de sus más diversas manifestaciones y, como no, también queremos intentar "parar" la galopante destrucción del medio ambiente, tanto urbano como natural.
Por que, al igual que ocurre en la ilusión de Ebbinghaus en la que los círculos centrales de las dos figuras parecen de diferente tamaño, sin embargo, si los comparamos veremos que son idénticos, la ilusión (la fuerza) depende de la distancia personal que adoptemos en relación a los problemas que nos rodean. Si nos alejamos de ellos, es seguro que nos sentiremos muy pequeños y abandonaremos toda intención de cambio. Pero si nos acercamos, o sea, nos implicamos y sumamos todos y todas, entonces los problemas comenzarán a parecernos más pequeños y, por tanto, superables.
Será a través de nuevas actividades, nuevas rutinas de coordinación, ensayando nuevas estrategias que nos ayuden a enfrentar estos retos como conseguiremos ir siempre un paso
más allá. ¡Querer es poder! Por tanto, como nosotros/as queremos, nosotros/as podemos!
